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Postgrados y Educación Continua

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Viernes 15 de Diciembre de 2023

Resultados PISA 2022 y efectos de la pandemia en Latinoamérica

La semana pasada se publicaron los resultados PISA 2022 y este martes 22 tuve el agrado de asistir al lanzamiento organizado por la CEPAL en su sede de Santiago. En esta nota dejo una pequeña síntesis de los principales resultados y algunas de mis impresiones al respecto.

Como contexto regional, es interesante notar que todos los países de Latinoamérica están bajo el promedio de la OCDE, y los países de la región se concentran en los puestos más bajos a nivel global. Chile y Uruguay son los países que se encuentran a la cabeza de la región, pero aun así tienen muchísimo por avanzar.

En Latinoamérica (Chile incluido) llama la atención cómo los aprendizajes están estancados desde 2013, sufriendo un retroceso extra, producto de la pandemia (región que mantuvo las escuelas cerradas más tiempo, 70 semanas en promedio), lo que nos lleva a preguntarnos sobre qué han estado haciendo (o dejado de hacer) los sistemas educativos durante la última década.

Si nos vamos a los resultados específicos de Chile en la prueba PISA 2022, vemos que las brechas disminuyeron porque el grupo que históricamente ha tenido mayores puntajes redujo sus aprendizajes. Es decir, el sistema en su conjunto es más homogéneo, pero todos aprendieron poco. Se igualó hacia abajo.

Respecto a la primera infancia, se evidencia un retraso en el ingreso a ésta, y aún no se ha retornado a números pre-pandemia. Sabemos que el nivel educativo con mayores retornos tanto para el aprendizaje como para el desarrollo integral de las personas y la sociedad es la educación parvularia; sin embargo, la política chilena en el 2023 no ha estado enfocada, ni de cerca, en cómo mejorar la cobertura y la asistencia de este nivel educativo, ni en cómo atraer más y mejores educadores de párvulos, ni menos en su desarrollo profesional.

Si queremos ver efectos a largo plazo, tenemos que lograr un acuerdo transversal para diseñar e implementar políticas que apunten a mejoras del sistema en sus puntos más críticos: mejoras en la educación parvularia, y políticas que influyan en el aprendizaje mismo, que se da en la interacción entre el profesor, el alumno y el material de aprendizaje (el llamado triángulo instruccional). Todo lo demás, que se ha visto en los últimos diez años, es secundario.  

Escrito por Trinidad Valdés

Directora del Magíster en Educación